En cuanto el conductor pulsa el botón de encendido, el Ateca X-Perience siempre está listo para la siguiente aventura sobre ruedas, gracias a su tracción a las cuatro ruedas y su eficaz sistema Haldex de quinta generación, adaptándose a cada situación de conducción, a las condiciones del terreno y a las preferencias personales en cada momento. Para ello, está equipado con el mando giratorio Driving Experience de la consola central y los perfiles del SEAT Drive Profile, Normal, Sport, Eco, Individual, nieve y Offroad, junto con la función de descenso de pendientes Hill Descent Control.
El objetivo del X-Perience es, precisamente, subrayar las características todo terreno del Ateca. Está pensado para aquellos clientes que, por sus aficiones, por su estilo de vida o simplemente por sus necesidades de uso, necesita o quiere sacar un mayor partido de las cualidades offroad del coche. El usuario de un Ateca normal va a conducir el 95% del tiempo por asfalto (en ciudad, carretera, autopista y autovía) y el 5% restante por caminos o nieve. En cambio, con el X-Perience esa proporción será del 75% en uso normal y 25% off-road. Un coche, en definitiva, con el que se puede llegar más lejos, destinado a ese tipo de conductores para los que el asfalto es un trámite y las pistas y caminos se quedan pequeños. Lo interesante, lo atractivo, el reto, el desafío está más allá de los límites convencionales.
SEAT traslada una parte de Barcelona a París inspirada en la innovación, modernidad, tecnología y diseño, todos ellos valores compartidos con la capital francesa y, por supuesto, con el Ateca X-Perience, que permite hacer esos últimos kilómetros por montaña que no te permite hacer un SUV convencional. Dónde éste se tiene que parar, el Ateca X-Perience puede continuar porque tiene neumáticos de mayor perfil con dibujo específico para offroad sobre llantas de 18 pulgadas de diseño exclusivo, unas molduras negras en los pasos de rueda, unos estribos laterales más marcados, una pintura que no se raya, una excelente altura libre al suelo y, finalmente, porque no le teme a obstáculos más complicados.
El Ateca X-Perience sirve para mostrar las posibilidades y el potencial que tiene la familia Ateca en el futuro
Evidentemente, además de una superior capacidad práctica de 4x4, el Ateca X-Perience tiene también un fuerte impacto visual, emocional, puro. “Por eso hemos escogido códigos típicos de los offroad, de los 4x4, empezando por el diámetro de rueda, con un perfil de neumático más grande, con un dibujo de 4x4, con protecciones delanteras, con un cubrecárter, con protectores para los antiniebla” comenta Alejandro Mesonero-Romanos, director de Diseño de SEAT. “El color también resulta muy importante. Hemos elegido un color que está relacionado con la naturaleza llamado Olive Green Matt (verde olivo mate), remarcado con tonos naranjas en los detalles que le dan un aspecto más técnico.”
El exterior se completa con detalles como los raíles cromados del techo, un spoiler trasero en la parte alta del portón del maletero que resalta el carácter deportivo del coche, guardabarros específicos en el paragolpes posterior y los logos 4Drive y X-Perience en el portón, así como un difusor frontal que enmarca y protege la parte inferior de la parrilla, recurso que se repite en la parte posterior del Ateca X-Perience.
Como en cada aventura siempre puede suceder un imprevisto, el Ateca X-Perience siempre cuenta con la gama más completa de sistemas de asistencia al conductor que ya conocemos en el Ateca, como el Traffic Jam Assist —que coordina el trabajo del asistente de salida involuntaria de carril Lane Assist y del control de crucero adaptativo (ACC)—, el Front Assist con función de frenado de emergencia que reconoce vehículos y peatones, los sistemas de reconocimiento de señales de tráfico, de detección de ángulo muerto y alerta de tráfico posterior, la cámara 360º con vista cenital, el asistente de aparcamiento en línea o en batería, el Emergency Assist, el asistente de luz en carretera…